martes, 5 de octubre de 2010

Capitulo 7





Álex y Ramón han escuchado las declaraciones de Jose.
--la verdad es que este hombre tiene su carácter... Si sigue con estas declaraciones alguien le va a romper la cara... a Mario no le va a gustar nada... ¡Son hermanos...¡¡
Ramón sonríe:
--si el pobre va a necesitar alguien de la familia que lo apoye...
--¿en qué estás pensando?
Ramón sonríe por lo que se le ha ocurrido.

Ha amanecido un nuevo día. Jose sale muy temprano. Quiere ir a dar una vuelta por los alrededores. Quiere ir solo. Como es muy temprano le pide a sus guardaespaldas que miren si está la prensa esperándolo. Hay poca pero hay. Jose quiere ir a dar un paseo solo, así que salen sus guardaespaldas custodiando a alguien como si fuera él, así Jose logra despistar a la prensa. Sale solo por la parte de atrás. Apenas ha recorrido unos metros cuando se topa como Mario que con mucho odio le dice:
--¡¡a ti te quería ver, desgraciada¡¡
El odio de Mario lastima mucho a Jose. Mientras, en todos los kioskos está ya la revista "¡adiós¡" que tiene en portada la foto de "el rondeño" y la condesa de Halbusjerke y publica una de las cartas y asegura que publicarán más semana a semana...

Mario y Jose están frente a frente. El odio de Mario es muy fuerte y aunque le hermano de Sara trata de responderle de la misma manera no puede. Jose se derrumba, lo ama. Ama a ese hombre que tiene delante, ama al hombre que todos dicen que es su hermano. Le duele el odio que ve en los ojos de él. Mario escupe a sus pies y le dice:
--¡¡Me das pena... eres despreciable...¡¡
Para lastimarlo Jose dice:
--más me despreciarías si supieras la de veces que me he masturbado pensando en tu cuerpo desnudo...
Mario lo agarra del cuello:
--¡¡maldito maricón, desgraciado... te voy a matar¡¡
Los hermanos pronto están rodeados de la prensa lo que para a Mario soltando a Jose. Ninguno se mete, sólo esperan sacar las mejores fotos. Una anciana se acerca a ellos:
--él es tu hermano... no deberías tratarlo así --le dice a Mario .
Con mucho desprecio, Mario le dice:
--¡¡no es verdad...¡
--Pues la revista "¡adiós¡" dice lo contrario...
Le muestra la portada con la foto de la pareja que impacta mucho a los dos.
--¡¡esto tiene que ser un invento de esto --señalando a Jose que ha caído al suelo lloroso-- voy a demandar a esta revista¡¡
Uno de los periodistas que están ahí trabajan para esa revista y dice:
--hay un certificado del notario que demuestra que la foto tiene 30 años y también la veracidad de una carta de la condesa a tu padre en la que se demuestra que él fue su primer hombre... Puedes demandar a la revista y verás que es cierto...
Mario hojea la revista con el rostro desencajado. El periodista sigue hablando:
--hay más cartas muy interesantes que irá publicando una por semana y en la última se demuestra que vosotros sois hermanos...
Mario y Jose se miran. Mario no dice nada, está muy impresionado. Jose siente deseo por Mario y eso lo aturde pero también le gusta que sea su hermano, poder ser su amigo así que por eso le duele tanto que él lo desprecie y para molestarlo le dice:
--¡¡yo no quiero ser el hermano de un asesino¡¡
Muy molesto pero en un tono fraternal, Mario le dice a su hermano:
--¡¡no hables de lo que no sabes¡ ¡¡¡Yo no soy un asesino, yo doy mi vida por los toros, no olvides que a mi padre lo mató uno y yo corro el mismo riesgo¡¡
Aunque no es lo que siente, Jose quiere herir a Mario como lo ha herido él:
--¡¡pues te mereces que te pasara lo mismo que a tu padre¡
Mario fulmina a su hermano con la mirada, los periodistas están encantados. La anciana regaña ahora a Jose:
--¡no blasfemes¡ ¡¡no digas cosas que no sientes, Mario es tu hermano y los dos lo tienen que aceptar...¡¡
Jose mira a su hermano con amor, se defiende:
--¡¡él me atacó primero y tengo derecho a que no me gusten los toros¡
--si pero no puedes menospreciar a tu hermano por su profesión sin tener en cuenta su valor y su arte... Deberías sentirte orgulloso de ser hijo de "el rondeño" –dice la anciana.
Jose se traga sus lágrimas. No le dice lo mucho que admira al difunto torero pese a que no le gustan los toros.
--señora, preferiría que no se metiera y no diera por hecho somos hermanos... que nuestros padres fueran amantes no quiere decir nada --dice Jose.
Con un tono algo fraternal, Mario le da a su hermano la revista:
--lee esta carta...
Jose mira a su hermano, se siente feliz de llevar su sangre. Se siente feliz de estar unido a él pero le duele que Mario no sienta lo mismo por él. Mario se acerca a los periodistas:
--¿¿de dónde sacó esto? --dice dirigido al periodista de "Adiós".
--No podemos desvelar la fuente...
Otro periodista que no sabe nada del asunto dice:
--es evidente que sólo uno de los hermanos de tu padre podía tener está información...
Mario siente rabia al pensar que uno de sus tíos lo ha traicionado. Se va sin decir nada. Unos periodistas van detrás de él. Otros se quedan con Jose. La anciana le recomienda:
--ve detrás de él...
Jose lo mira con deseo. Va en Jeans y le encanta su culo. Luego piensa que puede ser su hermano y siente culpa. Jose desearía tener una relación de hermanos con él pero lo ha lastimado, además siente que Mario no quiere ser su hermano. No se atreve a hacer nada. Se va para el otro lado pese que de corazón va con él.

En casa de Ramón, Álex se acerca a su padre que está vestido.
--¿vas a salir?
--obvio...
--espero que no te metas en ningún lío...
--Voy a preocuparme de mi familia...
--Miedo me das... ¿qué vas a hacer?
Ramón sonríe. No dice nada. De repente Álex ve unos documentos sobre la mesa:
--¿que es eso? ¿no eran esta las fincas del tío? No me digas que te pagaron tanto...
--No, no me pagaron tanto... aunque casi tengo para una...
--¿y para que tiene esta información?
--Dos de las 4 fincas que tenía tu tio están en venta y yo quiero que sean nuestras... ¿No te encantaría poder heredárselas algún día a tus hijos?
--claro que me gustaría pero si hay que hacer algo deshonesto no... ¿cómo piensa lograrlas?
--le voy a pedir a mi sobrino Jose que las compré y será cosa tuya que las ponga a tu nombre...
Álex mira a su padre con el rostro desencajado:
--¿¡estás loco¡?
--Ese maricón ve a un hombre desnudo como tú y se muere y seguro que sólo por verte desnudo te da todo lo que digas...
--¡¡no estoy en venta... no pienso hacer eso¡
Ramón sonríe:
--no tendrás que hacer nada... sólo dejar que tu primo disfrute de ese cuerpazo que Dios te ha dado¡
--¡¡ni se te ocurra¡
Álex está bien furioso pero Ramón no le dice nada. Sonríe y se va. Álex está muy nervioso, conoce a su padre y sabe que siempre logra lo que pretende.
--¿¿en qué lío me va a meter ahora??

Jose está lloroso en su habitación mirando esa revista. Le emociona ver al rondeño abrazado a su madre. Llora. Acaricia la foto, acaricia a él:
--papá... mi papá...
Besa a los dos con mucho cariño. Deja la revista sobre su mesita de noche como si fuera un retrato. Le emociona ser hijo del Rondeño pero le duele la reacción de Mario . Tocan a la puerta.
--¿¿quien es?
--soy tu tío... Ramón Vega...
Jose no puede creer que detrás de esa puerta está el hermano del hombre que ha admirado, no sabe porque los Vega lo buscan y es algo que le emociona pero le pone nervioso.


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